Qué ganas tenía de enseñaros mi estudio de maquillaje!
Hace ya 10 meses que dejé la escuela de maquillaje en la que trabajaba, emprendí por mi cuenta y empecé a volar sola en este mágico mundo del maquillaje que cada día me gusta más. Desde que estudié maquillaje con 17 años empezó mi obsesión y mis ansias por aprender cada vez más sobre este sector y tenía claro que algún día haría realidad mi sueño: Mi propio estudio de maquillaje.
Tengo este estudio en Barcelona y ya hace muchos meses que imparto clases personalizadas enfocadas a nivel profesional o bien automaquillaje para personas que no se quieren dedicar a este mundo pero simplemente quieren aprender a ponerse guapas cada mañana. Combino las clases con otros trabajos más esporádicos como shootings, televisión, publicidad y otros que me ocupan más tiempo como es la temporada de novias.
Aunque tengo organizados cursos en grupo, los cursos de maquillaje que más me solicitan los alumnos son totalmente personalizados. Me encantan estos cursos ya que me permite estar pendiente de cada alumno para controlar las dificultades que puede encontrar al realizar algún paso. No quiero que se me escape nada y me gusta enfocar cada curso con el temario que el alumno considera importante. De esta manera no hay un curso igual que otro porque tampoco un alumno es igual que otro. Además, cada maquillador puede tener diferentes objetivos.
Pienso que al ser un curso individual y privado, el alumno tiene menos reparo en preguntar o consultar dudas que muchas veces parecen obvias pero no lo son.
En todos los cursos explico toda mi técnica. No guardo nada en el tintero ni escondo ningún secreto profesional. Me gusta que cada alumno exprima TODOS mis conocimientos. Es importante que después los mezcle con los que ya tenía y de esta forma adopte una nueva y mejorada manera de trabajar. Así pues, ganará en seguridad a la hora de desenvolverse en los distintos terrenos que nos ofrece este mundo: novias, fotografía, televisión, pasarela, teatro o caracterización. El trabajar actualmente en todos estos sectores me permite transmitir al alumno todo lo que la experiencia me aporta día a día renovando las demostraciones y las posibles maneras de trabajar.
Hasta ahora no he tenido la oportunidad de mostrar las fotos en la web ya que faltaban elementos de decoración, mobiliario, cuadros y lo más importante: unas fotos bonitas!
Quiero dar las gracias a Raquel Benito, porque a parte de ser de las mejores fotógrafas que conozco, es una persona de diez entregada cien por cien a su trabajo.
Y como no, Marina de Bodas de Cuento, dedicó mucho tiempo para ayudarme a dar ese toque personal al estudio que solo ella sabe conseguir, y sobretodo a mi suegro! que es a quien le tocó el trabajo sucio de pintar los muebles, instalaciones eléctricas y reparaciones varias!
Sin más espero que os gusten tanto como a mí!
